RESUMEN: en RDC, la principal noticia de la semana reside en el desarrollo de las elecciones de los gobernadores en las 21 nuevas provincias, elecciones que la mayoría presidencial ha ganado ampliamente, lo que ha dado lugar a reacciones en diversos sentidos. La otra noticia es la llamada de los miembros del G7 a Moïse Katumbi para que sea candidato en su nombre a la presidencia, lo que una miembro de la mayoría considera prematuro ya que el calendario electoral no se ha fijado todavía. El interesado, que se encontraba en Bruselas dónde negociaría con Etienne Tshisekedi y que ha anunciado que daría pronto su respuesta a esta propuesta, ha criticado duramente las elecciones de los gobernadores: todas las candidaturas apoyadas por él han sido invalidadas.
En el dominio de la seguridad, el mandato de la MONUSCO, que conocerá una disminución de 1.700 cascos azules, ha sido renovado por un año. Las negociaciones han sido muy difíciles sobre la reducción de los efectivos: la RDC deseaba una reducción de la mitad, pero no lo ha obtenido. Por otro lado, el Consejo de seguridad ha insistido una vez más en la celebración de elecciones creíbles. Por su parte, la secretaria general del MLC ha abogado por un apoyo logístico de la ONU para que éstas puedan celebrarse en la fecha prevista.
In situ, la inseguridad que persiste en el este de la RDC justifica efectivamente la prolongación de este mandato. En Kivu Norte, las bandas Maï-Maï se han enfrentado a las FARDC en una región del territorio de Masisi donde la MONUSCO está ausente y donde el ejército acusa a las poblaciones desplazadas de complicidad con estas bandas. En el mismo territorio, los enfrentamientos entre comunidades hutu y hunde también se produjeron según la sociedad civil y los jefes tradicionales. Siempre en Kivu Norte, ha tenido lugar un ataque de presuntos combatientes de ADF en varias localidades del territorio de Beni. Por otro lado, en Goma, ha tenido lugar una violenta manifestación tras el asesinato de un jefe de barrio.
En Kivu Sur, un vehículo de la ONG Caritas ha sido atacado en el territorio de Uvira por hombres armados no identificados, mientras que en el territorio de Kabare, han tenido lugar enfrentamientos armados entre las FARDC y los Raïa Mutomboki.
En la exprovincia Oriental, las FARDC se han enfrentado una vez mas a los milicianos del FRPI en Ituri, mientras que ha tenido lugar un choque entre el ejército y los cazadores furtivos extranjeros.
En el dominio económico, varias ONG reclaman una revisión del código minero que todavía no está en la orden del día del Parlamento y que no es aceptado por el gobierno.
En Burundi, la tensión de la seguridad pública y política está siempre de actualidad. Se han lanzado dos granadas sobre un autobús de la policía, mientras que el partido en el poder acusa a la Iglesia católica acusada de “activismo”. En el dominio de la justicia, un colectivo de abogados invadió la CPI y el Alto Comisario de la ONU de los derechos humanos para ejecuciones extrajudiciales mientras que ha tenido lugar en el este del país una manifestación de presos que están encarcelados desde hace varios meses sin haber podido ver a un juez .Señalamos igualmente la muerte sospechosa de un antiguo ministro y diplomático ruandés encarcelado y acusado de trabajar para la información de su país así como la detención de un humorista burundés celebre por un sketch burlón sobre el presidente Nkurunziza .
En el plano diplomático, el presidente Museveni, cuya reelección discutida por sus oponentes ha sido avalada por el Tribunal Constitucional, ha retomado las difíciles negociaciones para intentar resolver la crisis burundesa. Por otro lado, la suspensión de la ayuda presupuestaria de la Unión Europea, que es una de las más importantes, pesa gravemente sobre la economía de un país muy dependiente de la ayuda exterior. Sabemos a propósito de eso que los soldados burundeses del contingente del AMISOM ya no serán pagados vía gobierno burundés, sino directamente, los salarios de todos los contingentes serán disminuidos en un 20 %.
En Ruanda, el tribunal militar de Kigali ha condenado el jueves en Kigali a 21 años y 20 años de prisión al antiguo jefe de la guardia presidencial y a un general en la reserva por ” incitación al levantamiento “: habían sido detenidos en agosto de 2014. Este veredicto es condenado por Human Rights Watch que ve en ello un atentado a la libertad de expresión
